EL PRIMER DÍA DE CLASES
JUEGO DE CHICOS
UN GRAN RIESGO
ANY CARMONA
Manuela llegó a clases muy temprano ese primer día de ese nuevo año. Su mamá le había dicho que siempre había que dar buena impresión para hacerse buen concepto con la nueva maestra. No había nadie, solo la portera que había abierto recién la puerta de entrada. ¡Qué vergüenza! Siempre con esas ideas locas, su mamá…
Recorrió con su mirada todo el patio y se detuvo en la puerta de entrada a su nueva aula, la de 6º grado, ahora un grado más alto. Fue ahí cuando lo vio. Era un chico nuevo que no conocía del año pasado. Estaba parado con su mochila entre las piernas, jugando con su celular. ¡Qué canchero se lo veía! Alto, flaco y de cabello largo. “Pronto te lo harán cortar”, pensó Manuela. No tuvo más remedio que acercarse pues la curiosidad la mataba.
- Hola, ¿sos nuevo?
- Sí – contestó sin dejar de mirar su celular.
- ¿Cómo te llamás?
- Pedro – ahora la miró.
- Yo soy Manu, bienvenido – le dijo la niña acercándose para darle un beso.
- Hola – Pedro le dio un beso.
“¡Qué lindo es!”, pensó Manuela que se propuso trabar amistad con el nuevo.
- ¿Por qué viniste tan temprano?
- Mi mamá, ¡es una hincha!
- Igual que la mía…vení sentémonos en la escalera que todavía falta media hora.
- Dale – le dijo el rubio.
Ese fue el mejor comienzo de año en la vida escolar de Manuela…¡Quién lo diría, en 6º Grado y ya con novio! Ella sí que era una chica muy moderna. Y todo se lo debía a su mamá…
JUEGO DE CHICOS
Fuimos al corso ese carnaval. Desde ese año en mi país, el Carnaval se hizo feriado por cuatro días y se reabrieron los corsos con murgas en toda la ciudad. Yo me vestí de odalisca. Me sentía una muñeca Barby con mi traje lleno de lentejuelas y mi velo transparente sobre la cabeza, cubriendo mi nariz y mi boca. Pero el pupo, al aire…¡Qué linda estaba! Salimos con mi hermana a caminar por la calle San Juan donde se desarrollaba el desfile. Ella se vistió de azafata (siempre decía que cuando fuera grande, sería azafata). Allí vi a todos mis compañeros de la escuela. Nos juntamos a jugar. Estábamos disfrazados con los trajes más variados: un médico, una maestra, un mecánico lleno de grasa en la cara, una mujer-maravilla y muchos más.
Música, comparsa con murgas y tambores, juegos con la nieve, corridas, risas y gran diversión. Pero no advertimos que había que ser cuidadosos y mantenernos muy unidos pues había mucha gente y la muchedumbre se agolpaba muy ajustada, cerca del escenario.
Cuando se perdió Pamela, nadie se dio cuenta. Todavía la veo aparecer en la factura de la luz. Una organización que se llama Missing Children, la sigue buscando.
UN GRAN RIESGO
Dijeron que en la Matiné no habría alcohol, tampoco se podían conseguir cigarrillos. Los otros chicos de 7º le aclararon a Agustín que si quería fumar había que hacerlo en la vereda. Adentro no se permitía. Afuera tampoco, pero en fin...
Cuando se apagó la luz para encontrar en la oscuridad y a tientas, a la pareja que te tocara (así era el juego), vió que la suya era nada menos que la gorda del 6º. ¡Nooooooo! qué mala suerte, al encenderse la luz su redonda cara estaba muy cerca, frente a la suya.
- Hola Agus, tengo puchos – le dijo – Si bailás lento conmigo, te los regalo.
- ¿En serio? – le contestó el chico evaluando la situación. Con la poca plata que le diera su papá no podría comprar nada y hacía rato que los quería probar –Ehhhhhhhh, bueno, dale, pero un solo tema – decidió.
Ese fue el comienzo de su adicción al tabaco, luego probó otras cosas y hoy está en rehabilitación…
ANY CARMONA
Sí, pues, para niños grandes. Valen, Any...Manolo
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